Los pisos turísticos en Barcelona tienen los días contados. El alcalde Jaume Collboni ya avisó hace unos meses que quería eliminar estos alojamientos de las zonas más tensionades, como por ejemplo Ciutat Vella. Ahora, esta medida se extiende al resto de la ciudad.
El Ayuntamiento de Barcelona anunció a finales de junio que extinguirá las 10.101 viviendas de uso turístico (HUT) existentes ahora en Barcelona el noviembre del 2028, con el objetivo de destinar todos estos inmuebles al parque de vivienda residencial para ampliarlo. La medida se incluye en el marco del que el consistorio ha bautizado como «Plan Vivir».
“La ciudad no se puede permitir una cifra tan elevada de pisos turísticos […] en un contexto en que la dificultad de acceso a la vivienda y los efectos negativos de la masificación turística son evidentes y compartidos”, subraya el gobierno municipal. El ejecutivo pretende, de este modo, que, a partir de noviembre del 2028, desaparezca de la ciudad de Barcelona la figura del piso turístico, tal como hoy la conocemos.
Barcelona dejará de renovar licencias de uso turístico
Para conseguir este objetivo, el consistorio usará el decreto ley de la Generalitat de regulación de las viviendas de uso turístico, aprobado al 2023 con el apoyo del PSC, ERC, Comunes y la CUP, y que deja en manos de los ayuntamientos el tope en los pisos turísticos.
Con la normativa en la mano, Collboni anunció este junio que ya no se darán nuevas licencias con el objetivo que en noviembre del 2028, cuando se agoten todas las licencias actuales, los 10.101 pisos turísticos legales pasen en el parque residencial, ampliando así la oferta.
Cambios en la normativa estatal del alquiler de temporada
Por otro lado, este julio de 2024, el Gobierno de España ha anunciado que está trabajando en nueva normativa urgente sobre el alquiler de temporada o turístico, con el objetivo de regular y armonizar el mercado de alojamientos temporales en todo el Estado.
Todavía se desconocen los detalles de esta nueva normativa, pero ya se ha anunciado que el Gobierno tramitará un real decreto ley para modificar el artículo 3 de la Ley de Arrendamiento Urbanos (LAU) en cuanto a los alquileres de temporada, de forma que los propietarios que destinen viviendas al alquiler turístico estén obligados a acreditar y justificar la causalidad para formalizar el contrato. También se ha anunciado que “se aclarará” la capacidad de decisión de las comunidades de propietarios sobre la prohibición o limitación de pisos turísticos en sus edificios
Por otro lado, también se ha anunciado que se creará la “Plataforma de registro único de alquileres de corta estancia” en el cual se regulará el intercambio de datos relativo al servicio de alquiler de alojamientos de corta duración, del cual también formarán parte los alquileres turísticos, los alquileres por habitaciones o, incluso, el arrendamiento de embarcaciones flotantes, de forma que todos los alquileres de viviendas de corta estancia tendrán que registrarse en esta plataforma.